10 cosas que hacer para sentirte BIEN

En esta entrada quiero compartir las cosas que me harían feliz, pero FELIZ de verdad, en mayúsculas. Por más vueltas que le he dado, no le he encontrado pegas. Serían los deseos que pediría al genio de lámpara si me lo encontrara. (Ay, cuando le pille). Levantarte cuando te dé la gana y acostarte cuando…

Maldito cerebro

¡Ay! ¡Qué difícil es dominar la percepción! «Ver la paja en el ojo ajeno y no ver la viga del nuestro», pues eso es lo que me pasa. Mi cerebro se empeña en rellenar los huecos de mi texto y en no verlo cómo está sino cómo lo pensé o cómo quiero que sea.  Cada…

Desayuno con… capitán Morales

La capitán Morales es el Pepito Grillo que todos deberíamos tener. Es una mujer fuerte y soñadora, de principios y convicciones inamovibles. Con un gran sentido ético, siempre sabe qué está bien y qué está mal. Aquí está en el desayuno, en su casa de Queens, Nueva York. «Marta Morales tenía prisa. Tenía que acudir…

Éxito = Talento + ganas de aprender + sed

¡Eureka! He encontrado la fórmula secreta de éxito. Pero no el éxito común, del que hay muchos, de ese éxito cotidiano, de los que tenemos todos. No. El ÉXITO con mayúsculas. Ese éxito súper extraordinario, del que tienen una sola de cada diez mil millones millones de personas. He analizado un montón de variables, cientos:…

Operación Caronte. 5º Borrador: tortura necesaria

Como ya decidí no darle más vueltas a la estructura dramática de Operación Caronte, me tocó concentrarme en la forma. ¡Cómo se pueden poner tantos gerundios y perífrasis por centímetro cuadrado! Verbos retorcidos para acciones imposibles y sujetos múltiples para verbos moribundos, adjetivos insustanciales, frases inconexas, adverbios acabados en -mente como las amapolas en el…

Desayuno con… James McLean

Sigo con la presentación de los personajes. Estos desayunos no son extractos de la Operación Caronte, sino una manera de saludar.

El Glamour se lleva por dentro

No hago más que escuchar por ahí que escribir no tiene glamour, que no hay nada de encanto  en el hecho mismo de escribir, que es un trabajo duro, constante, de dejarse los cuernos en la pantalla del ordenador o dondequiera que lo hagas; pero quiero rebelarme. Yo sí escribo con glamour, lo siento. Se…