A la mitad de la cuarta revisión del borrador, me doy cuenta de que hay una trama secundaria horrorosamente mal.

Tengo que reescribir al menos dos capítulos completos. Creo que cuando lo escribí, me dediqué a vomitar ideas inconexas bienintencionadas, pero sin la salsa que lo liga todo. Y ha quedado así, como un vómito espachurrado en el papel.

No me encuentro en mi mejor momento. He dejado de ver la luz al final del túnel.

Sé que en algún momento tendré que parar de darle vueltas a este borrador maldito, pero quiero que contenga de manera eficaz lo que quiero expresar y que el mensaje llegue alto y claro al que se aventure a leerlo.

Espero conseguirlo, aunque ahora mismo, he perdido el flow.

By María Arenas

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